“Del Señor es la tierra y su plenitud”
Salmo 24:1
¿Te has fijado lo bello que está el cielo?, ¿has oído el canto de las aves?, ¿has visto el color de las flores?, ¿has sentido la suave caricia de la brisa? No tienes que salir para apreciar esto, sólo mira a través de tu ventana o cierra tus ojos y recrea estas imágenes. Son formas creativas en las que Dios te dice: “Te amo, hijo/a mío/a”.