que dice la Biblia acerca de…

Dios- Único

Juan 17:3, «Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.» (RVR1960)

Anteriormente mencioné la importancia de la historia de salvación como clave para creer en la existencia de Dios. De igual manera puede ser usada para hablar de Dios como la única Divinidad que es verdadera. Esto es porque al igual que en el mundo en el que fue escrita la Biblia, hoy día siguen existiendo creencias en la existencia de otros dioses.

Antes de ascender al cielo Jesús les dio a sus discípulos la tarea de contarle a todo el mundo la historia de lo que su Padre celestial había hecho para perdonarnos de todo aquello que nos separaba de El y la promesa de vivir para siempre en gozo, amor y paz. Esas instrucciones ya nos hacen sospechar que hay una sola salvación y por lo tanto un sólo Dios.

Otros lugares en la Biblia también nos presentan a Dios como único.

Jeremías 16:20, «¿Hará acaso el hombre dioses para sí? Mas ellos no son dioses.» (RVR1960)

Salmos 115:4, «Los ídolos de ellos son plata y oro, Obra de manos de hombres.», (RVR1960)

Finalmente, es bueno mencionar que en las culturas antiguas de la Biblia también se hablaba de los dioses de las otras naciones.

Éxodo 15:11, «¿Quién como tú, oh Jehová, entre los dioses? ¿Quién como tú, magnífico en santidad, terrible en maravillosas hazañas, hacedor de prodigios?», (RVR1960)

Sin embargo, siempre Yavé o Yaweh (el cual es el nombre más cercano que conocemos de la Divinidad judía y cristiana) se afirmaba como el que su pueblo debía adorar a tal punto, que cuando se iban tras otras divinidades, les venía opresión, calamidad y hasta destrucción, ya que la bendición y cuidado de Yavé se había ido. Lo interesante es que cuando el pueblo pedía ayuda Dios estaba allí para socorrerlos.

Ezequiel 34:16, «Yo buscaré la perdida, y haré volver al redil la descarriada; vendaré la perniquebrada, y fortaleceré la débil; mas a la engordada y a la fuerte destruiré; las apacentaré con justicia.» (RVR1960)

¡Nunca los había abandonado!

Pastor Billy